El primer ministro canadiense, Mark Carney, confirmó que ratificaría la decisión de su predecesor Justin Trudeau de arrestar a su homólogo israelí, Benjamin Netanyahu, si ingresa a Canadá, de conformidad con la orden de arresto de la Corte Penal Internacional (CPI), informó la agencia de noticias ANI.
Carney hizo la confirmación durante una entrevista con Bloomberg el domingo. Cuando se le preguntó directamente si estaría dispuesto a arrestar a Netanyahu, respondió simplemente: “Sí”.
Sobre la cuestión del Estado palestino, Carney afirmó: “El objetivo final es un Estado palestino libre y viable que viva al lado del Estado de Israel en paz y seguridad”. Criticó a la administración de Netanyahu y afirmó: “Las acciones del gobierno de Netanyahu fueron diseñadas explícitamente para poner fin a cualquier posibilidad de un Estado de Palestina, en violación de la Carta de las Naciones Unidas y contraria a la política del gobierno canadiense, que se ha mantenido constante desde 1947”.
Al dirigirse a la oposición de Estados Unidos, Carney reconoció: “Sí, Estados Unidos no está de acuerdo con la decisión que tomamos, que tomó España, que tomó Francia, que tomó el Reino Unido (y que) otros 150 países en la ONU han tomado, pero nuestro objetivo común es el mismo”.
Los comentarios del primer ministro canadiense se produjeron después del último acuerdo de alto el fuego entre Israel y Hamás, negociado en el marco del Plan de Paz del ex presidente estadounidense Donald Trump, que puso de relieve las tensiones regionales en curso.
Según The Jerusalem Post, actualmente no hay indicios de que Netanyahu o el ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, vayan a borrar sus antecedentes de la Corte Penal Internacional (CPI) como parte de un gesto político, como una recompensa por poner fin al conflicto o a cambio de una disculpa. Si bien estas ideas se habían discutido bajo el tema de “justicia transicional”, en gran medida han sido abandonadas en los últimos años.
El Jerusalem Post señaló además que si Netanyahu pierde el poder en las elecciones de 2026, su exposición legal podría aumentar, ya que algunos países ofrecen a los jefes de Estado en ejercicio inmunidad procesal, que puede expirar una vez que dejen el cargo.
Aunque la Sala de Apelaciones de la CPI debilitó las órdenes de arresto contra Netanyahu y Gallant en abril, los casos siguen activos. Los documentos legales presentados durante el verano sugieren que es probable que se confirmen las órdenes, y posiblemente se espere pronto un fallo final, lo que mantendrá el foco de atención en el liderazgo israelí.
(Con entradas ANI)









