Walmart anunció el martes que su canasta anual de comida de Acción de Gracias costará menos de $4 por persona este año, lo que marca el precio más bajo desde que el gigante minorista lanzó el programa en 2022.
El paquete, diseñado para alimentar a 10 personas, incluye más de 20 artículos, como un pavo Butterball de 13,5 libras a un precio de 97 centavos por libra (su costo más bajo desde 2019), junto con productos básicos tradicionales para las fiestas, como relleno, arándanos, judías verdes, panecillos e ingredientes para pastel de calabaza. La cesta completa cuesta menos de 40 dólares.
El precio agresivo representa una caída significativa con respecto a la oferta del año pasado, que costaba aproximadamente $7 por persona. La medida se produce cuando los principales minoristas afinan sus estrategias promocionales de cara a la crucial temporada de compras navideñas, en la que los consumidores aún se recuperan del aumento de precios al ritmo más rápido en cuatro décadas bajo el presidente Joe Biden.
El anuncio de precios de Walmart sigue a una oferta similar de comida navideña presentada la semana pasada por Aldi, la rama estadounidense de la cadena alemana de supermercados de descuento, lo que indica una intensificación de la competencia entre los tenderos por los compradores preocupados por su presupuesto.
“Este año, Walmart está elevando el estándar aún más, con la comida navideña más asequible hasta el momento”, dijo la compañía en un comunicado, señalando que millones de clientes han comprado la canasta desde su debut hace tres años.
El minorista con sede en Bentonville, Arkansas, está ampliando sus ofertas navideñas más allá de la comida tradicional, introduciendo opciones de canastas con un solo clic que incluyen una comida de Acción de Gracias sin gluten, una canasta centrada en la salud con alternativas ricas en proteínas, alineándose con la campaña Make America Healthy Again de la administración Trump. También hay una opción de cena con costillas.
El impulso promocional se produce durante un período crucial para los minoristas, ya que la temporada de compras navideñas, de noviembre a enero, suele generar una parte importante de las ventas anuales. A pesar de una desaceleración en la contratación, la tasa de desempleo en Estados Unidos se ha mantenido baja y el gasto de los consumidores ha sido resistente. El director ejecutivo de Walmart en Estados Unidos dijo la semana pasada que los clientes “se mantuvieron resilientes y estaban gastando a un ritmo saludable”.
