Después de las victorias contra Platense y el Instituto para el regreso del Torneo Clausura, el entrenador de Río Dio noticias que sacudieron el mundo millonario. Más allá del resultado, Marcelo Gallardo se centró en las decisiones que tomó con respecto al futuro de varios jugadores. “No es cómodo tomar tal decisión”, dijo, abriendo la puerta a una limpieza profunda en el equipo. El ciclo de “muñeca” entró en una etapa de transición que requiere medidas drásticas, incluso si no son del todo agradables.
Con la Copa Mundial del Club ya en el pasado, el cuerpo técnico detectó que ciertos nombres no pueden continuar en el equipo hasta diciembre. La evaluación fue clara: algunos jugadores de fútbol tuvieron segunda e incluso tercera oportunidades para revertir su situación, pero no cumplieron con las expectativas. Por lo tanto, Gallardo decidió que es hora de darlos.
La renovación de River ya no espera
La muñeca, en ese momento, dejó una frase clave que explica los antecedentes de esta decisión: “La renovación del equipo marcó decisiones. Y le informé a cada futbolista que consideré que debía buscar otros desafíos”. Por lo tanto, el DT confirmó lo que ya era un secreto abierto: varios jugadores no se tendrán en cuenta y deben encontrar un nuevo destino en este mercado de invierno. Incluso algunos con un pasado importante en el club y el afecto personal del propio Gallardo.
Entre los nombres encabezados por la lista se encuentran Federico Gattoni, Santiago Simón, Matías Kranevitter, Manuel Lanzini, Rodrigo Alidro y Gonzalo Tapia. Este último estaría cerca del préstamo a San Pablo en Brasil, mientras que otros trabajan con sus representantes para encontrar nuevas opciones. La directiva ya estaba informada de la situación y está dispuesta a facilitar los resultados, siempre que se resuelvan los aspectos contractuales.
El DT quiere que lleguen refuerzos lo antes posible, pero también que el grupo está purificado. La idea es evitar las tensiones internas con jugadores que no tendrán minutos y mantener una competencia saludable entre los que seguirán. La prioridad es clara: terminar de armar un equipo que responda a la demanda de torneos locales y la Copa Libertadores, el gran objetivo del semestre.
Una nueva etapa en la era de Gallardo
El mensaje fue fuerte y directo. Gallardo ya no se salva, sabe que este segundo ciclo frente al río necesita caras nuevas y otras energías. No se trata solo de rendimiento, sino de compromiso, actitud y predisposición a combatir cosas importantes. La muñeca comienza a construir otro río, uno más joven, hambriento y sin figuras que viven del pasado. Algunos ídolos, por ahora, no tienen lugar en esa reconstrucción.