La abogada Ana Rosenfeld fue una de las invitadas recientes de la tradicional mesa de Legrand Mirtha, en la pantalla El Trece, y después de su participación compartió algunas reflexiones sobre la experiencia y los detalles que no se vieron en el aire. Con su estilo directo y sincero, los medios de comunicación agradecieron la invitación y destacaron la atmósfera cálida y relajada que se vivió durante la grabación del programa icónico.
“Soy el último que permanece en el productor de Mirtha Legrand”, dijo con una sonrisa, refiriéndose a su estrecha relación con el equipo detrás del ciclo. En diálogo con la prensa, Rosenfeld elogió la calidad humana del equipo de trabajo y comentó que era una “mesa muy agradable pero coloquialmente interesante”.
Durante el programa, Mirtha compartió anécdotas personales y momentos recientes que la marcaron. Ana Rosenfeld se refirió a uno de ellos en particular: “Nos contó lo que sucedió cuando fue al desfile de Roberto Piazza, le dijo a todo, hay cosas que salen y cosas que son”. Según el abogado, Legrand fue muy abierto en sus historias, sin filtro y con la honestidad que la caracteriza.
Uno de los temas más sensibles que tocó el conductor fue el episodio en el que fue criticada públicamente por expresar la frase “Long Live Freedom, Fuck”, algo que generó controversia en las redes sociales. “La afectó a atacarla por haber dicho ‘Live La Libertad’, no trató de estar a favor, está mal”, explicó Rosenfeld, dejando en claro que Mirtha no tenía intención política al pronunciar esas palabras, pero lo hizo como una expresión general de deseo de libertad y no como una declaración partisana.
Mirtha Legrand Style
La palabra Mirtha Legrand sigue siendo sinónimo de elegancia, historia y presencia en la televisión argentina. A los 97 años, sigue siendo una figura central del espectáculo nacional, y su mesa mantiene ese halo de interés público que atrae tanto a las figuras del espectáculo como al público.
La participación de Ana Rosenfeld no solo trajo declaraciones picantes, sino que también mostró el lado humano de un más reflexivo, abierto y siempre dispuesto a hablar con el corazón. Una vez más, su programa se posicionó como un espacio de reunión y confesiones sin guiones.