El principal diplomático chino, Wang Yi, instó el miércoles a los Estados Unidos a trabajar con China para abordar la causa raíz de las tensiones bilaterales, la percepción mutua, para sentar una base sólida para una relación estable y constructiva entre las dos potencias principales.
Wang, director de la Oficina de la Comisión de Asuntos Exteriores del Comité Central del Partido Comunista de China (CPC), hizo los comentarios durante su reunión con Graham Allison, profesor de la Universidad de Harvard en Beijing.
Solo fijando correctamente el “primer botón” de las relaciones China-Estados Unidos, las dos potencias principales pueden allanar el camino hacia una asociación sólida y estable basada en estos principios, dijo Wang.
Wang expresó su aprecio por los esfuerzos de larga data de Allison para mejorar la comprensión mutua entre China y los Estados Unidos y para explorar formas para que las dos potencias importantes coexistan pacíficamente.
Hizo hincapié en que la filosofía china de “armonía sin uniformidad” refleja una tradición oriental de abrazar la diversidad mientras busca un terreno común. Esto contrasta fuertemente con la tendencia occidental hacia el pensamiento de suma cero que a menudo asume que la ganancia de un lado debe venir a expensas del otro, señaló el principal diplomático chino.
El concepto chino, dijo Wang, proporciona una base para construir intereses compartidos y fomentar la coexistencia pacífica entre las naciones, incluso entre China y Estados Unidos.
En la era actual, China y Estados Unidos deben desarrollar una nueva narrativa que pueda guiar sus interacciones futuras y definir un marco constructivo para la participación entre dos potencias importantes, agregó Wang.
Reiteró que los tres principios del presidente chino Xi Jinping: respeto mutuo, coexistencia pacífica y cooperación de ganar-ganar) sirven como el enfoque fundamental de China en el manejo de sus relaciones con los Estados Unidos.
Wang alentó a personas reflexivas de todos los ámbitos de la sociedad estadounidense a contribuir a fomentar una comprensión más objetiva y constructiva de China.
Sus esfuerzos, dijo, pueden desempeñar un papel positivo en la construcción de una dinámica más racional y con visión de futuro entre los dos países.
El profesor Allison, a su vez, comentó que el concepto chino de “armonía sin uniformidad” comparte similitudes con la tradición estadounidense de adoptar la diversidad.
Hizo hincapié en que China y los Estados Unidos viven en el mismo planeta, están profundamente entrelazados y deben buscar una postura estratégica de coexistencia para evitar la llamada trampa de Tucídides.
Allison pidió el establecimiento de un nuevo marco basado en principios para las relaciones entre Estados Unidos y China, con respeto mutuo en su núcleo, y se comprometió a continuar apoyando la comunicación y el desarrollo constante de lazos bilaterales.
