Producido por la Comisión Nacional de Investigación, Ciencia y Tecnología (NCRST) en colaboración con la UNESCO y apoyado por el Gobierno de Japón, el informe evalúa la preparación de Namibia en dimensiones legales, técnicas, sociales, educativas y económicas.
Namibia ha presentado su informe de evaluación de preparación de inteligencia artificial histórica, posicionándose para aprovechar el potencial transformador de la IA mientras se compromete con el desarrollo ético, inclusivo y sostenible.
Producido por la Comisión Nacional de Investigación, Ciencia y Tecnología (Ncrst) en colaboración con UNESCO Y apoyado por el Gobierno de Japón, el informe evalúa la preparación de Namibia en dimensiones legales, técnicas, sociales, educativas y económicas.
La evaluación subraya la promesa de IA para sectores como agricultura, agua, energía, salud, educación, cambio climático y seguridad, al tiempo que destaca la urgencia de un marco regulatorio formal de IA, una mayor conciencia pública e infraestructura ampliada.
Namibia ya ha integrado las prioridades de IA en los planes nacionales, incluido el borrador del Plan Nacional de Desarrollo 6 y el Plan de prosperidad de Harambee II. Iniciativas como el Instituto Nacional de IA responsable propuesto, los programas de grado centrados en la IA en la Universidad de Namibia y la Universidad de Ciencia y Tecnología de Namibia, y el establecimiento de centros informáticos de alto rendimiento indica un fuerte impulso institucional.
El informe se basa en las mejores prácticas globales, alineándose con la estrategia de IA continental de la Unión Africana, la declaración de Windhoek sobre la IA en el sur de África y la recomendación de la UNESCO sobre la ética de la IA. Las recomendaciones requieren sistemas de IA transparentes y responsables, leyes sólidas de protección de datos, mitigación del sesgo algorítmico y la implementación de IA segura en infraestructura crítica.
Si bien Namibia ha avanzado en la política digital, incluido un proyecto de ley de protección de datos y estrategias nacionales de seguridad cibernética, los desafíos permanecen, particularmente la falta de leyes vinculantes de IA y una experiencia limitada de IA nacional. El informe concluye con un llamado a la acción: pasar de la evaluación a la implementación, asegurando que la IA se aproveche para el bien público, la innovación y el crecimiento equitativo.