Polonia introdujo controles temporales en sus fronteras con Alemania y Lituania el lunes en un esfuerzo por detener lo que el gobierno dice es un número creciente de migrantes indocumentados que cruzan desde el norte y el oeste.
La reimposición de los cheques fronterizos es solo el último ejemplo de cómo las crecientes preocupaciones públicas entre la Unión Europea sobre la migración están esforzando el tejido de la zona de Schengen libre de pasaporte del bloque. Los Países Bajos, Bélgica y Alemania ya han implementado medidas similares.
En Polonia, el debate sobre la migración se ha calentado cada vez más en las últimas semanas, con grupos de activistas de extrema derecha que lanzan “Patrullas de Ciudadanos” en la frontera occidental en medio de informes de los medios polacos de las autoridades alemanas que envían migrantes indocumentados a través de la frontera.
“Todo continúa sin incidentes”, dijo el ministro del Interior, Tomasz Siemoniak, a la emisora privada TVN24 el lunes después de que los controles entraron en vigencia.
“El tráfico actualmente se mueve sin problemas, 800 oficiales de policía, 200 soldados de gendarmería, 500 soldados del Ejército Territorial”, dijo Siemoniak, y agregó que todos los servicios estaban “en plena preparación”.
Hablando en una conferencia de prensa de medianoche sobre la frontera alemana, cuando comenzaron los cheques, Siemoniak dijo que solo los funcionarios estatales, como los guardias fronterizos, estaban autorizados a verificar los vehículos que ingresan a Polonia, refiriéndose a las “patrullas de los ciudadanos”.
La Guardia Fronteriza dijo en un puesto en X que había detenido a un ciudadano estonio en la frontera de Polonia con Lituania por transportar cuatro migrantes ilegales que se cree que son afganos.
Endurecimiento del estado de ánimo público
El sentimiento público en Polonia hacia los migrantes se ha endurecido desde que una mujer de 24 años fue asesinada en la ciudad de Torun por un ciudadano venezolano en junio. El domingo, unas 10,000 personas participaron en una marcha organizada por activistas nacionalistas en recuerdo de ella.
Mientras tanto, el sábado por la noche, un hombre polaco murió después de ser apuñalado durante una pelea en Nowe, el norte de Polonia. Un ciudadano colombiano fue arrestado bajo sospecha de ser responsable.
La policía dijo el lunes que habían detenido a un total de 13 personas en relación con el incidente: tres polos y 10 colombianos.
La información de TVP del canal de noticias estatal mostró multitudes enojadas en la ciudad fuera del albergue de los trabajadores donde vivían los colombianos.
Los activistas de los derechos humanos condenaron a las “Patrulias de Ciudadanos”.
“Las acciones de estos autoproclamados grupos son el resultado de una narrativa política radicalizante que presenta la migración como una amenaza, que alimenta los temores sociales y la desconfianza de las instituciones estatales”, dijo la Fundación Helsinki para los Derechos Humanos en un comunicado el viernes.
“La fundación una vez más apela a un debate público honesto y confiable sobre la situación de migración y la política fronteriza, basada en hechos, no miedo y manipulación”.