Kseniia Petrova, una científica e investigadora nacida en Rusia en la Universidad de Harvard, fue acusada el miércoles de un cargo penal de contrabando de bienes en el país.
El cargo penal representa una escalada por parte de la administración Trump en un caso que ha atraído el escrutinio internacional de académicos y científicos en todo el mundo.
Petrova, de 30 años, ya enfrentaba la deportación después de no revelar embriones de rana que trajo al país desde Francia en febrero. Después de que los agentes de aduanas y protección fronteriza descubrieron las muestras científicas de Petrova, fue detenida, su visa no inmigrante J-1 fue revocada y fue trasladada a un centro de detención de Louisiana.
Petrova continúa esperando la decisión de un juez sobre si será deportada a Rusia, que huyó en 2022 después de que Rusia invadió Ucrania, temiendo la persecución política. Petrova había sido franco contra la guerra.
“Si regreso, me temo que será encarcelado debido a mi posición política y mi posición contra la guerra”, dijo Petrova a The Associated Press el mes pasado.
El miércoles se celebró una audiencia sobre su caso y, según el New York Times, un fiscal federal le dijo al juez que el gobierno tiene la intención de deportar a Petrova de regreso a Rusia.
The Times informó que una audiencia de fianza acababa de programarse para finales de este mes, aparentemente preparando el escenario para el lanzamiento de Petrova. Según el Times, el abogado de Petrova, Gregory Romanovsky, puso en tela de juicio el momento del gobierno, diciendo el cargo penal, “presentó tres meses después de la supuesta violación de aduanas, está claramente destinado a hacer que Kseniia parezca un criminal para justificar sus esfuerzos para deportarla”.
“Casi inmediatamente después de la audiencia, nos quedamos cegados por la insulgación de una denuncia penal sin mérito”, dijo Romanovsky, según The Times, señalando que la audiencia había establecido que la detención era ilegal.
“El momento de la transferencia de Kseniia fuera de la custodia del hielo a la custodia criminal es especialmente sospechoso porque sucedió justo después de que el juez estableció una audiencia de fianza para su liberación”, continuó.
Associated Press contribuyó.









