Un grupo, la Iniciativa de Desarrollo Comunitario de la Zona Cultural Otobo Nsukka, ha escrito al Ministerio Federal de Obras para intervenir en los desastres ecológicos causados por la canalización inadecuada de vías fluviales a las casas de algunos residentes de la comunidad Amalla en el área del gobierno local de Udenu del estado de Enugu.
En la carta dirigida al controlador federal, el Ministerio Federal de Obras, con fecha del 25 de junio de 2025, el grupo llamó la atención del ministerio a los desastres ecológicos que la canalización incorrecta de las vías fluviales había causado a los nativos afectados. La carta fue firmada por el coordinador del grupo, el príncipe Onah Chibueze.
Titulado “Canalización de vías fluviales a edificios residenciales en Oturkpo-Obollo Road”, el grupo instó al ministerio a instruir a la compañía que maneja la construcción, China Hub, a volver a rutas de las vías fluviales para evitar el colapso inminente de los edificios afectados. También buscó compensar “por los propietarios traumatizados de las estructuras”.
The group stated that “We champion the preservation of cultural, environmental and human rights of the people within and outside Nsukka Zone of Enugu State. Our attention was drawn to the inhuman channelling of waterways to the house of one Mr Ikechukwu Odo of Umuagbadu-Umuegari Amalla, Udenu LGA, among others, by China Hub, the contractors handling the ongoing rapid dual carriageway of the federal government, which atraviesa la comunidad Amalla.
“The contractor, by negligence, created these artificial ecological disasters by not conducting the impact assessment of channelling waterways to houses that are not even marked for demolition. Our further investigations revealed that the owner of one of the threatened buildings, a hitherto commercial driver but currently bedridden by stroke, has been passing through trauma since the channelling of the waterways to his house. He is visibly depressed, which has deteriorated his health condición.
“Nos dijo que se había comunicado con el ingeniero del sitio con la queja, pero su alerta de peligro fue tratada con ligereza. La atención del gobernante tradicional de la comunidad también se sintió atraída por el peligro inminente, pero fue en vano”.
Onah declaró que los ocupantes de las casas afectadas “no solo estaban expuestos a convertirse en refugiados en su comunidad demasiado pronto, sino que podrían ser víctimas del colapso de las estructuras, lo que podría resultar en muertes”.
Sin embargo, el grupo elogió al gobierno federal por la dualización en curso de la carretera, desde Makurdi hasta la 9ª milla. Sin embargo, agregó que “pero nosotros, como activistas ambientales, culturales y de derechos humanos, no nos doblamos las manos y veríamos personas inocentes para pasar por un fuego infernal evitable”.
El coordinador del grupo, en una entrevista con el Whistler el lunes, declaró que las autoridades del ministerio aún no habían tomado medidas proactivas desde que se les presentó la queja. Dijo que el grupo usaría todos los medios legítimos para reparar la anomalía.
Según él, “nos dijeron que el ministerio visitaría la escena cuando informamos el asunto. Pero hasta hoy, no ha pasado nada. Las víctimas todavía enfrentan los peligros”.
Los esfuerzos para obtener una respuesta del ministerio no arrojaron resultados positivos, ya que no se respondieron las llamadas.
