El gobernador del estado de Kano, Alhaji Abba Kabir Yusuf, ha despedido a dos ayudantes de alto nivel después de revelaciones condenatorias de paneles de investigación separados que los vinculan con la controvertida fianza de un presunto rey de drogas y la desviación de granos paliativos destinados a residentes vulnerables.
El Secretario del Gobierno del Estado (SSG), Alhaji Umar Farouk Ibrahim, anunció la decisión en un comunicado el sábado, diciendo que la acción del gobernador estaba en línea con la postura de tolerancia cero de su administración sobre la corrupción.
Abubakar Umar Sharada, asistente especial senior de movilización política, fue despedido después de que un comité especial lo encontró como el “autor intelectual” detrás de la fianza de la fianza para el supuesto narcotráfico de drogas, Sulaiman Aminu Danwawu.
“El comité confirmó la culpabilidad de Sharada a través de su propio testimonio, que estableció su participación directa en el proceso de fianza”, reveló Ibrahim.
El escándalo ha generado una indignación generalizada en el estado, llegando en un momento en que las agencias de seguridad están intensificando la lucha contra las drogas ilícitas.
En un caso separado, Tasiu Adamu Al’amin Roba, asistente especial senior en la oficina del gabinete, se le mostró la puerta de salida después de estar implicada en la reembolso de los granos paliativos en un almacén en el área de Sharada en 2024.
El SSG dijo que Roba ya había sido procesado en la corte por cargos de robo y conspiración criminal, y agregó que los artículos desviados eran activos públicos destinados a los pobres.
A ambos ayudantes desestimados se les ha ordenado que devuelvan todas las propiedades del gobierno en su poder antes del lunes 11 de agosto de 2025, y que desisten inmediatamente de desfilar como funcionarios estatales.
El gobernador, sin embargo, despejó a Hon. Musa Ado Tsamiya, asesor especial sobre drenajes, después de que los investigadores no encontraron evidencia para apoyar las acusaciones en su contra.
El gobernador Yusuf aprovechó la oportunidad de emitir una fuerte advertencia a los nombrados políticos, enfatizando que “disciplina, transparencia e integridad” siguen siendo no negociables en su administración.
“Nuestro compromiso de combatir la corrupción es inquebrantable. Los funcionarios públicos deben mantener los más altos estándares de integridad tanto en sus deberes oficiales como en sus vidas privadas”, declaró.
El gobierno también advirtió a los miembros del público que no llevaran a cabo cualquier negocio oficial con los ayudantes saqueados, advirtiendo que cualquiera que lo haga “lo hace bajo su propio riesgo.