La inauguración de un nuevo papado: “En su propia agenda, el tema social, la asistencia social y la libertad de expresión son los primeros”

El analista internacional, Eduardo Martínez, en diálogo con el Canal E, enfatizó la entronización del Papa Leo XIV y su impacto en la política internacional y las relaciones con Argentina.
Eduardo Martínez explicó que: “Cuando estaba decidiendo en el cónclave qué tipo de papa podría venir después de Francisco, había una grieta. La verdad es que eligieron a alguien que tiene ambas pendientes al mismo tiempo”.
Las características del nuevo Papa
Por otro lado, definió a Leo XIV como “un papa muy político al que le gusta involucrarse en la política internacional” y que, aunque hay problemas que Francisco había promovido como un matrimonio igual o el papel de las mujeres, “eso lo deja como más adelante”. Además, enfatizó que “se está mostrando como un pastor”.
Con respecto a una decisión reciente que involucra a Argentina, Martínez reveló que “Paglia fue la que vino aquí e iba a decirlo. Bueno, Paglia acaba de ser lanzada”. En cambio, fue nombrado Monseñor Reina. Luego, enfatizó que Leo XIV “hoy comenzó a involucrarse en la guerra entre Rusia y Ucrania como un posible mediador con Trump” y que “es un pastor de Leo XIV y un Leo XIV muy político”.
¿Cuál es la agenda del Vaticano?
Con respecto a la agenda del Vaticano, dijo: “Los problemas son los temas del Vaticano. No importa cuándo viene el enviado y quién es el enviado”. En este sentido, comentó que Leo XIV estaba “muy preocupado por algunos temas sociales, como los muertos en Gaza, como la crisis entre Rusia y Ucrania” y que “en su propia agenda, el problema social, la ayuda social y la libertad de expresión son los primeros”.
Sobre la relación entre Argentina y el Vaticano, el analista internacional explicó el significado político de la ausencia de Javier Milei en la entronización: “En medio de una elección es para dos temas, o porque está yendo muy bien y quiere estar en la foto, o está yendo demasiado mal y necesita golpear el último remadido”. También agregó que, “el envío del ministro de Relaciones Exteriores ha sido muy bueno, pero si vemos que la mayoría envió presidentes, los reyes y las monarquías, fuimos muy relegados a nivel de participación”.
También advirtió que “también podemos esperar que el Vaticano nos tome igual, digamos, de ahora en adelante” y que “es muy probable que las relaciones sean cordiales, pero distantes”. Y él explicó: “Creo que será una relación correcta, donde ni siquiera el gobierno arrojará municiones hacia el Vaticano, si no está muy perturbado” y comentó que “para el Vaticano somos un país periférico”.