Funerales de Francisco: Blindan Roma con defensa aérea y equipos anti -didish

La ciudad de Roma se encuentra en un estado de máxima alerta y seguridad debido a los funerales del Papa Francisco, programado para hoy. Se espera que cientos de miles de figuras fieles y políticas en todo el mundo acudieran a la ciudad eterna para despedirse del pontífice argentino, que murió a los 88 años.
La capital italiana, conocida por su tráfico caótico y su infraestructura saturada, se prepara para semanas de intensa actividad que durará el cónclave, programado para principios o mediados de mayo, donde los Cardenales elegirán al nuevo Papa.
El desafío de logística y seguridad es colosal. Más de cincuenta jefes de estado y diez monarcas en ejercicio confirmaron su ayuda a la misa fúnebre que tendrá lugar en la Plaza de San Pedro a las 10 de hoy, 5 de Argentina.
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Las autoridades italianas cerraron por completo los accesos al Vaticano y las calles adyacentes. Se establecieron rigurosos controles de seguridad que incluyen mochilas, escáneres de rayos X y patrullas constantes por parte de la policía italiana, la policía y la gendarmería del Vaticano. En total, alrededor de dos mil agentes se despliegan permanentemente en el área.
Además de las medidas de la tierra, se impuso una zona de exclusión de aire en Roma, en funcionamiento las 24 horas, y las unidades anti -didrones se mostraron con sistemas de inhibición de la señal para evitar cualquier actividad sospechosa. La delegación de Donald Trump tiene una protección especial llamada “zona verde”.
Los aviones de combate están en alerta para intervenir si es necesario, y los francotiradores se colocan estratégicamente en los techos a lo largo de la Via del Conciliazione y la colina del Gianicolo. Los helicópteros policiales vuelan constantemente sobre el centro histórico, tratando de determinar si hay algún peligro para los visitantes.
Aunque es imposible prever exactamente el número de asistentes, las autoridades estiman que serán al menos unos 250 mil fieles, una cifra similar a la que fue a los funerales del Papa Benedicto XVI en 2023.
El evento coincide con el comienzo del Jubileo, Año Santo de la Iglesia Católica, que podría aumentar aún más la afluencia de personas. La logística es particularmente complicada por el trabajo de infraestructura que ya afectó la ciudad y la sobrecarga en los sistemas de transporte.
El ambiente en Roma es solemne, tenso y sobrecargado, con un fuerte dispositivo de seguridad que recuerda grandes momentos históricos de la iglesia.
A pesar de los inconvenientes para los ciudadanos y los turistas, el objetivo es garantizar una despedida segura y digna para un Papa que marcó profundamente el panorama religioso y político mundial con su mensaje de paz, justicia social y reconciliación.
Misa de despedida Una misa de despedida se llevará a cabo a mediados de la mañana. La ceremonia durará alrededor de una hora y media y, en ella, participarán 224 cardenales y 750 obispos y sacerdotes. La madera y el ataúd de zinc se ubicarán en la plaza, antes del altar.
Entre los asistentes confirmados, además de Trump, se encuentran los presidentes Javier Milei, Luiz Inacio Lula da Silva y Gabriel Boric. El presidente francés también aparece, Emmanuel Macron, quien llegó a Roma a tiempo para visitar la capilla ardiente. Y el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski.
Las delegaciones oficiales extranjeras, alrededor de 170, ocuparán el lado derecho mirando la basílica. En la primera fila habrá Milei, para presidir el país donde está Bergoglio y el italiano Sergio Mattarella.
Es seguido por los monarcas, como el rey español Felipe VI, y el resto de los presidentes en orden alfabético. Las autoridades estiman que decenas de miles de personas seguirán la ceremonia a través de pantallas gigantes colocadas en las cercanías de San Pedro y luego la gira con los restos mortales.
Ruta fúnebre. El último viaje del Papa Francisco, desde la Plaza de San Pedro hasta Santa María La Mayor, donde será enterrado, tendrá una extensión de 6 km y estará completamente blindado.
Será un viaje que cruzará las calles del centro de Roma y que las fuerzas de la orden “protegerán” estrechamente vigiladas. El itinerario exacto que cruzará el cortejo no se conoce con precisión, pero se descarta que incluirá pasar por los lugares más simbólicos de la ciudad, como el Coliseo.
¿Cómo es la tumba de Santa María la Mayor?
Agencias
La tumba del Papa Francisco, que será enterrada hoy en la Basílica de Santa María La Mayor en el centro de Roma, estará en mármol y tendrá la única inscripción de “francisco”. Esto fue solicitado por el pontífice, como lo explicó el Vaticano.
En una breve declaración acompañada de una foto del proyecto, las autoridades especificaron que el mármol utilizado proviene de Liguria, una región del noroeste de Italia de la cual son originalmente una parte de los antepasados italianos del pontífice argentino.
El entierro de Jorge Bergoglio se ubicará en una nave lateral de la Basílica, cerca del altar de San Francisco. La tumba fue organizada en el nicho de la nave lateral, entre la Capilla Paulina, la Capilla del Salus Populi Romani, y la Capilla Sforza de la Basílica de Santa María La Mayor, cerca del altar de San Francisco.
Santa María La Mayor, imponente iglesia del siglo V ubicada en el centro de Roma y dedicada a la Virgen, es uno de los cuatro pontificios basílicos de la ciudad eterna. Alojan las tumbas siete papas, incluida Clemente IX, la última enterrada allí en 1669. También está el entierro del arquitecto y escultor Bernini, autor de las colonnatas de la Plaza de San Pedro.
Jorge Bergoglio, muy apegado al culto a la Virgen María, tenía el hábito antes y después de cada viaje al extranjero para visitar esta basílica, que pertenece oficialmente al territorio del Vaticano.
La iglesia fue construida para el año 432 a pedido del Papa Sixtus III, en la colina del Esquilino, y alberga algunas de las reliquias más preciosas del catolicismo.