“El excedente fiscal es una sorpresa, pero no una garantía”

En un contexto de aparente estabilidad de intercambio, el economista Lucas Carattini explicó canalizar los factores detrás del déficit cero y la caída del dólar financiero.
Excedente fiscal: una sorpresa relativa
Según el economista, “el gobierno logró mantener el excedente fiscal en marzo, y eso es algo positivo”. Sin embargo, aclaró que todavía es “un poco sorprendente”, teniendo en cuenta que la disminución transitoria de las retenciones aún gobierna y que el “impuesto de paella” llamado no se cargó.
A pesar de estas limitaciones en la recolección, hubo un aumento en los impuestos relacionados con la actividad económica, como el IVA, las ganancias e incluso el impuesto de cheques. “Ese es un hecho positivo porque muestra que hay un movimiento económico”, dijo Carattini.
En cuanto al gasto público, también destacó una contención relativa: “No hubo aceleración, excepto en beneficios sociales, que están creciendo por encima de la inflación”. Aun así, advirtió que “con esta nueva dinámica de intercambio, tendremos que ver si la actividad no sufre el próximo mes, lo que afectaría la colección”.
Baja Financial Dollar: ¿Tendencia o espejismo?
La caída del dólar financiero, 5% en el MEP y en el efectivo con liquidación, generó sorpresa. ¿Es un cambio estructural o un problema conjuntario? “Cada vez que hay rumores de cambio de esquema de intercambio, hay movimientos defensivos en el mercado”, explicó el economista. Los importadores que se adelantan a comprar, los exportadores que retienen liquidaciones y especulaciones de cobertura son parte de la tabla habitual. Pero ahora había un giro.
“Una vez que el cambio se formaliza, los exportadores se suicidan por vender. No tienen garantías de que mañana no tengan que vender más barato”, dijo Carattini. Añadió: “Estamos en el momento estacional más fuerte del año en términos de admisión de dólares agrícolas”.
También recordó una situación similar en 2018: “En ese momento estábamos en el piso de la banda hasta que las elecciones cambiaron radicalmente las expectativas”.
¿Por qué no flotó el dólar desde abajo?
Una crítica recurrente apunta a la decisión del gobierno de permitir la flotación del dólar desde un valor alto, en lugar de hacerlo desde una base más baja. Carattini justificó la estrategia con una lógica de incentivos: “Si comienza un tipo de cambio muy bajo, nadie liquidado. Y el objetivo era precisamente que ingresan los dólares”.
Además, mencionó que el banco central necesitaba un “colchón” debido a la fuerte liquidación de los exportadores que se esperaba. “Si lo deja muy abajo, no generará el incentivo correcto. Ahora, con este nivel, la rueda comienza a moverse”.
Sin embargo, advirtió que se agregará la volatilidad al mercado. “La cuenta de capital para las inversiones financieras fue liberalizada, con un mínimo de seis meses. Eso agrega presión y movimiento al tipo de cambio”, continuó.
Agro no retiene, pero no gana
Aunque se percibe que el campo está liquidando más, la realidad no es tan favorable para todos. “Muchos pequeños productores están con la cabeza bajo el agua. Los costos aumentaron mucho en dólares, y el precio en pesos de los granos no se movió con la última devaluación”, explicó.
Sobre la posibilidad de retener, estaba claro: “Con tasas tan altas, la aceleración es muy costosa. Además, ya se sabe que las retenciones volverán a su nivel anterior en junio. No hay muchos incentivos para no vender”.
Riesgos y dudas
El economista también señaló que la “dólarización endógena” solicitada por el gobierno no se materializó como se esperaba: “La gente blanqueó dólares, sí, pero no dinamizó la economía. Nadie va a Super y paga con dólares”.
Finalmente, enfatizó un riesgo de fondo: “El tipo de cambio es una regla de juego clara. Si el gobierno interviene cuando se adapta, rompe esa confianza. Y eso es peligroso”.