¿Cuál es el momento ideal para hacer ejercicio nuevamente después de ser madre?

Retirar la actividad física después de dar a luz proporciona beneficios no solo para el cuerpo sino también emocional, sino que todo debe hacerse con tiempos adecuados y bajo orientación profesional.
La actividad física después del parto no solo es segura, sino también beneficiosa para la salud física y emocional de las mujeres. Sin embargo, el momento apropiado para reanudarlo varía según cada caso.
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Según el Servicio Nacional de Salud del Reino Unido (NHS), si el nacimiento era vaginal y sin complicaciones, puede comenzar con ejercicios suaves, como caminatas, unos días después del nacimiento. Por otro lado, si se trataba de una cesárea o hubo intervenciones médicas, es aconsejable esperar entre 4 y 6 semanas y obtener la aprobación del médico tratante.
“La clave es escuchar el cuerpo, comenzar gradualmente y progresar lentamente”, indican desde el NHS, que también recomienda ejercicios de bajo impacto y rutinas que fortalecen el piso pélvico, como los ejercicios de Kegel.
Beneficios probados y pautas de referencia
El ejercicio posparto ofrece ventajas físicas, como la tonificación muscular, la mejora de la postura y la recuperación del suelo pélvico. Pero también proporciona beneficios emocionales: ayuda a reducir el estrés, mejorar el estado de ánimo y facilitar el sueño.
Según un informe publicado por The Independent (Reino Unido), las nuevas madres deberían aspirar a realizar al menos 150 por semana de actividad física moderada, distribuidas durante toda la semana. Esta recomendación, respaldada por el NHS, no busca presionar sino guiar en el establecimiento de una rutina realista y sostenible.
Por su parte, la Clínica Mayo (EE. UU.) Enfatiza que el ejercicio moderado también puede prevenir o aliviar la depresión posparto y contribuir a la autoestima en el proceso de adaptación física y emocional.
Actividades seguras y consejos prácticos
Cuando se trata de moverse nuevamente, lo más importante es elegir ejercicios adaptados al cuerpo en recuperación. Algunas opciones seguras y recomendadas son:
– Caminatas al aire libre: ideales para comenzar, especialmente si están integrados en la rutina con el bebé.
– Pilates de yoga o posparto: mejorar la flexibilidad, la respiración y ayudar a reconectarse con el cuerpo.
– Ejercicios de fitball: fortalezca la zona abdominal y lumbar de una manera controlada.
– Natación o Aquagym: una vez de alta médica, permiten que todo el cuerpo se ejercite sin impacto.
Es esencial evitar ejercicios de alto impacto o que exigen un esfuerzo abdominal intenso hasta que tengan una recuperación total del suelo pélvico y los músculos centrales.
El NHS también recomienda evitar comparaciones y avanzar sin presiones externas: “Cada mujer tiene su propio ritmo, y lo más importante es cuidarse a sí mismo, no a la demanda”.