Los especímenes, considerados una especie en peligro de extinción, permanecen bajo especial cuidado hasta que el personal de fauna los retira de la provincia.
Dos especímenes de PUMA fueron rescatados en Añatuya y actualmente reciben atención especializada en la Fundación Mundial Sano, que funciona como un hospital de tránsito para animales salvajes. Allí son evaluados y estabilizados mientras se espera la intervención de la fauna de la provincia.
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De la institución destacaron la importancia de proteger esta especie, cuya población está amenazada. Además, pidieron a la comunidad que evite las interacciones directas con los animales y no intente capturarlos por su cuenta.
La Fundación Sano Mundo advirtió que los visitantes deben ingresar acompañados de un adulto responsable si desean observar a Los Pumas. No se permitirá a los niños acercarse solo a las jaulas, una medida que busca prevenir accidentes y proteger tanto a las personas como a los animales.
