El portavoz presidencial, Manuel Adorni, defendió el nuevo acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y aseguró que los 20,000 millones de dólares que Argentina recibirá será “disponibilidad gratuita” y destinada a limpiar el saldo del banco central. En ese sentido, Adorni comentó que la diferencia con otros acuerdos es que el objetivo es defender el “bolsillo de los argentinos”.
«El stock de las acciones no depende solo del acuerdo con el FMI, sino que depende de otras variables. No puedo especificar cuándo se elevarán las acciones ”, dijo Adorni, cuando se me preguntó sobre la posibilidad de que se abre un intercambio a corto plazo. A pesar de la incertidumbre en ese punto, el portavoz insistió en que el programa económico del gobierno es” lo correcto “y que es normal que haya volatilidad en el dólar”. Es la vida misma, ya que puedes tener tu pareja que puedes tener algún día y no por esa razón y no por eso.
En otra sección de su exposición, el funcionario explicó que la recomposición de reservas permitirá que “los pesos sean mucho más apoyados” y que la base monetaria tiene “dólares que quedarse para que todos estén tranquilos con sus pesos en el bolsillo”. De esta manera, dijo que el programa económico de Javier Milei busca garantizar la estabilidad financiera a largo plazo.
Además del acuerdo con el FMI, Adorni anunció que todas las facturas emitidas por la venta de bienes y servicios deben incluir el costo del impuesto al valor agregado (IVA) de manera obligatoria. “Los argentinos merecen saber dónde va el dinero que ganaron con el fruto de sus esfuerzos”, dijo, destacando que la transparencia fiscal es un pilar central de gestión.
El portavoz presidencial también arremetió contra la Confederación General de Trabajo (CGT) para la huelga general solicitó el 10 de abril. “El desempleo del CGT, que es el sector más imprecable que la sociedad tiene, todo lo que hace es complicar la vida de las personas que no representan”, dijo. En ese sentido, cuestionó el papel del sindicalismo en las últimas décadas: “Deben reflexionar: ¿dónde estaban en los últimos 50 años cuando los salarios eran cada vez más miserables y la informalidad laboral estaba aumentando?”
En sus críticas, Adorni también señaló la gestión del gobierno anterior y el papel de los sindicatos en ese período. “¿Qué pasó en los últimos 4 años que vieron como si no hicieran una huelga general?” Él plantó, en referencia a la inacción del CGT durante la administración de Alberto Fernández. El centro de los trabajadores convocó la medida de la fuerza en el rechazo de las políticas de ajuste del gobierno y el avance de la ley de autobuses en el Congreso.
El acuerdo con el FMI y la disputa con los gremios marcan la agenda económica y política del gobierno, que se compromete a consolidar su programa de estabilización mientras enfrenta tensiones crecientes con los sectores sindicales y la oposición.









