Kosovo acordó una solicitud del gobierno de los Estados Unidos para recibir temporalmente a un grupo de migrantes deportados de los Estados Unidos.
Los funcionarios de Estados Unidos y Kosovar confirmaron el acuerdo, que es parte del impulso del presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, para forjar acuerdos de deportación del tercer país.
Según CBS News, Kosovo aceptará hasta 50 deportados bajo el acuerdo, que la embajada del país describió como un gesto de cooperación con un aliado internacional clave.
“En respuesta a la solicitud de los Estados Unidos con respecto a la recepción y reubicación de ciudadanos del tercer país, hemos expresado nuestra disposición a cooperar con los Estados Unidos para abordar este asunto en condiciones establecidas”, declaró la embajada.
Los deportados serán trasladados temporalmente a Kosovo, mientras que los funcionarios allí coordinan los esfuerzos para devolverlos a sus países de origen. No está claro de qué países son originalmente o las razones específicas por las que no pueden ser devueltos directamente.
Por lo general, estos acuerdos de tercer país se utilizan cuando los países de origen de los migrantes se niegan a aceptarlos, a menudo debido a tensiones o preocupaciones diplomáticas sobre la identificación y el estatus legal.
El gobierno de Kosovo dijo que conservaría el derecho de seleccionar a las personas de una lista propuesta, dependiendo de los criterios relacionados con la seguridad pública y el estado de derecho.
El Departamento de Estado de EE. UU. Elogió el acuerdo, calificando el paso importante para implementar la agenda de aplicación de la inmigración de Trump.
“Agradecemos a nuestro socio Kosovo por recibir nacionales del tercer país retirados de los Estados Unidos y facilitar el regreso seguro de esos alienígenas a sus países de origen”, dijo el departamento.
Kosovo, que declaró la independencia de Serbia en 2008, mantiene fuertes lazos con Estados Unidos. Estados Unidos fue uno de los primeros países en reconocer su soberanía, aunque algunas naciones, incluida Serbia, aún rechazan su independencia.
Esta no es la primera vez que Kosovo ha ayudado a Estados Unidos con los esfuerzos de reubicación. En 2021, el país acordó organizar evacuados afganos luego de la retirada militar estadounidense de Afganistán, especialmente aquellos que requieren una investigación de seguridad adicional.
El acuerdo con Kosovo es el último de una serie de acuerdos de deportación bajo la estrategia de inmigración de línea dura de la administración Trump.
Estados Unidos ya ha enviado varios cientos de deportados de Asia y África a Costa Rica y Panamá, y transferido a más de 200 venezolanos, algunos con presuntas afiliaciones de pandillas, a El Salvador.
Sin embargo, otros intentos de deportar a los migrantes a países inestables como Libia y Sudán del Sur han sido bloqueados por los tribunales de los Estados Unidos.