Cuando el ex presidente Muhammadu Buhari regresó al poder en 2015 como presidente elegido democráticamente después de decidir a Nigeria como dictador militar en la década de 1980, muchos esperaban una nueva era de transparencia, reforma y progreso democrático.
El ex presidente murió a la edad de 82 años el domingo en un hospital de Londres. Había gobernado Nigeria entre mayo de 2015 y mayo de 2023.
Pero a lo largo de su presidencia de ocho años, Buhari se encontró en el centro de numerosas tormentas de fuego en línea, a menudo provocada por sus propios comentarios, políticas o acciones gubernamentales.
Desde gaffes virales hasta represiones digitales a gran escala, la presidencia de Buhari fue probada con frecuencia por la población cada vez más vocal y experta en Internet de Nigeria. En un país donde las redes sociales se han convertido en una herramienta poderosa tanto para el activismo como para la responsabilidad, incluso una sola declaración podría encender la indignación nacional.
Este artículo explora cinco de los momentos más controvertidos de Buhari que se desarrollaron en línea. Los momentos dieron forma a la percepción pública de su liderazgo y revelaron tensiones más profundas entre la autoridad y la libertad digital en Nigeria.
Contexto:
Mientras estaba en una visita oficial a Alemania, Buhari respondió a las críticas de su esposa, Aisha Buhari, quien había cuestionado la dirección de su gobierno al decir. “No sé a qué fiesta pertenece mi esposa, pero ella pertenece a mi cocina, mi sala de estar y la otra habitación”.
Reacción en línea:
El comentario provocó indignación global, especialmente entre los grupos de derechos de las mujeres. El hashtag #theotherroom tendió en tendencia en Twitter nigeriano, alimentando los debates en torno a los roles de género y el patriarcado en la política africana.
Contexto:
Twitter eliminó un tweet de Buhari haciendo referencia a la guerra civil nigeriana en un contexto amenazante contra los grupos secesionistas. El gobierno tomó represalias prohibiendo Twitter en todo el país, citando “uso persistente de la plataforma para actividades capaces de socavar la existencia corporativa de Nigeria”.
Reacción en línea:
La medida provocó una reacción masiva de los ciudadanos nigerianos y la comunidad internacional. Los nigerianos usaron VPN para evitar la prohibición, mientras que los activistas llamaron a la suspensión un ataque contra la libertad de expresión. Los hashtags como #keepiton y #twitterban surgieron.
Reacción en línea:
Su dirección eventual no reconoció a las víctimas ni aceptó la responsabilidad, lo que provocó hashtags como #EdBadGovernance, #LekkImassacre y Global Solidarity bajo #endsars. El movimiento en línea expuso fallas de gobernanza y amplificó el activismo digital dirigido por jóvenes.
Reacción en línea:
En lugar de ignorarlo, Buhari se dirigió públicamente al rumor en Polonia, diciendo:
“Es real yo, te lo aseguro. Pronto celebraré mi 76 cumpleaños y seguiré siendo fuerte”.
El rumor, aunque sin fundamento, se convirtió en una de las historias virales más extrañas de Nigeria, destacando la desconfianza en el liderazgo y la potencia de la desinformación digital.
Contexto:
Después de la prohibición de Twitter y la disidencia en línea durante #endsars, el gobierno liderado por Buhari propuso un control más estricto sobre las redes sociales a través del proyecto de ley de redes sociales (oficialmente la protección contra la falsedad de Internet y el proyecto de ley de manipulaciones).
Reacción en línea:
Los nigerianos se unieron en línea bajo hashtags como #saynotosocialmediabill, acusando al gobierno de intentar hacer bocadillos y suprimir las voces juveniles. Los activistas advirtieron que podría crear una “dictadura digital”.
Estas controversias reflejan la tensión entre los impulsos autoritarios y la resistencia digital durante la presidencia de Buhari. Desde comentarios sexistas hasta represiones en las redes sociales, cada controversia provocó activismo digital en todo el país, mostrando cómo las plataformas en línea se convirtieron en un campo de batalla para la expresión cívica, especialmente entre los jóvenes de Nigeria.