Él Senado Desde la provincia de Buenos, Aires aprobó esta semana el controvertido proyecto que permite la selección indefinida de legisladores, concejales y consejeros escolares. Sin embargo, el proceso legislativo que condujo a esta sanción omitió un paso clave de las regulaciones internas: después de un sorteo de 22 a 22, el Vicegobernador Verónica Mapario sintió sintestado directamente, cuando en realidad el texto normativo requiere repetir el voto antes de tomar esa medida.
El artículo 102 de la regulación, en vigor desde septiembre de 2024, establece que, dada una igualdad, el debate y el voto nuevamente deben reabrirse. Solo si el empate persiste puede intervenir el voto de la presidencia. Esta secuencia no fue respetada.
Una frase con guiño político y un error de procedimiento
Magario desempacó con una frase que evocó el famoso “voto no positivo” de Julio Cobos en 2008: “A diferencia de lo que sucedió hace largos años en Argentina, mi voto es positivo”. Aunque buscó dar un tono histórico a su intervención, la irregularidad en el procedimiento legislativo generó múltiples preguntas institucionales.
Los senadores confirmaron el error pero evitaban las declaraciones públicas. Lo sorprendente es que ninguno de los 44 legisladores presentes, incluso aquellos que votaron en contra, se detuvieron para desafiar el voto o exigir que las regulaciones se cumplan con la carta.
Silencio institucional y respaldo implícito
El silencio posterior de la cámara, sin propuestas formales o quejas judiciales, abre un flanco político y legal. Aunque la regulación no impone consecuencias automáticas, la violación de las normas internas debilita la validez institucional del procedimiento. Algunos analistas interpretan que la omisión de los legisladores podría leerse como un respaldo tácito, un argumento similar al utilizado en el Senado nacional cuando se votaron aumentos de dietas.
Tampoco hubo referencias a la regulación cuando el Vicegobernador mismo se molestó con la Senadora Florencia Arietto por transmitir la sesión de redes sociales. En esa ocasión, Magario solicitó leer la regulación, pero omitió hacerlo en el momento clave de la votación.
Expresar debate y posibles desafíos
El proyecto ya se ha emitido a la Cámara de Diputados de Buenos Aires, donde se espera un procedimiento rápido antes del cierre de listas. Si se aprueba sin modificaciones, se habilitará la selección indefinida para legisladores provinciales, concejales y consejeros escolares. Si se introduce algún cambio, debe regresar al Senado.
En los diputados también se anticipa un debate polarizado. El partido gobernante busca avanzar ante el calendario electoral, aunque la falta de consenso y el posible enjuiciamiento del procedimiento podría detener la implementación inmediata de la norma.
Cruces, ausencias y fracturas internas
La sesión estuvo marcada por la tensión política. La iniciativa fue promovida por el senador Luis Vivona (Unión para la Patria), quien cuestionó el límite de dos mandatos aprobados en 2016. Argumentó que esta regla representaba una interferencia en el derecho de los ciudadanos a elegir y ser elegido.
A pesar de la disciplina del partido, no todos los legisladores oficiales acompañaron el voto. La senadora masiva Sofía Vanelli votó en contra y Federico Fagioli, desde el frente de Patria Grande y cerca de Juan Recordois, estaba ausente. Habiendo votado en contra, el resultado habría sido diferente.
El proyecto fue aprobado gracias al apoyo de la Unión para la Patria (excepto Vanelli), y los votos clave de Marcelo Daletto (UCR + Cambio Federal) y los disidentes Libertarios Carlos Kikuchi y Sergio Vargas. Contra el Pro, Sectores de la UCR, los avances de La Libertad y el popular monobloque derecho. Silvana Ventura, de la Unión, Bloque de renovación y fe, se abstuvo.